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La rehabilitación post-accidente cerebrovascular tiene como objetivo restaurar la movilidad y las habilidades cognitivas que a menudo se ven afectadas después de un derrame cerebral. La terapia con células madre y exosomas es reconocida como un enfoque prometedor para mejorar la recuperación, incluso en pacientes con eventos de ataque isquémico, hemorrágico o ataque isquémico transitorio (AIT), años después del incidente inicial.
CRC tiene un historial comprobado en el tratamiento de pacientes con accidente cerebrovascular, respaldado por más de 5,000 artículos publicados sobre el tratamiento con células madre para derrames cerebrales. Esta terapia promueve la reparación y regeneración neuronal mediante el uso de células madre que se diferencian en varios tipos celulares y liberan factores de crecimiento para apoyar la curación en el cerebro.
El protocolo de tratamiento combina dos vías de administración: inyecciones intratecales en el líquido espinal y administración intravenosa (IV) en el torrente sanguíneo, lo que asegura un enfoque integral de las áreas afectadas. La mayoría de los pacientes experimentan mejoras notables en un plazo de 2 a 4 meses, particularmente en la movilidad y la función cognitiva.
Aunque muchos síntomas responden favorablemente, algunos, como los problemas del habla, pueden requerir apoyo adicional. Se recomienda evaluar la respuesta del paciente al tratamiento inicial antes de considerar intervenciones adicionales. A través de esta terapia innovadora, los sobrevivientes de un derrame cerebral pueden lograr habilidades motoras mejoradas, mejoría en el habla y mejor retención de la memoria, lo que les permite llevar una vida más independiente y satisfactoria después del accidente cerebrovascular.
La administración intratecal consiste en entregar entre 35 y 100 millones de células madre directamente en el líquido espinal mediante una punción lumbar realizada por un anestesiólogo certificado.
Este método permite que las células madre eviten la barrera hematoencefálica y lleguen al cerebro, donde pueden penetrar y reparar el tejido neural dañado. El propósito principal de la administración intratecal es reparar y regenerar el tejido neural y la vaina de mielina dañados, que componen el 98% del cerebro. En el caso de los derrames cerebrales hemorrágicos, también se enfoca en la reparación de los daños en los vasos sanguíneos.
Además, este método tiene como objetivo reducir la inflamación cerebral y del sistema nervioso central tanto a corto como a largo plazo, lo que prepara las áreas dañadas para la regeneración y alivia la presión física dentro del cerebro.
Es importante destacar que las células madre pueden replicarse, creando más exosomas que contribuyen a una cascada de curación a largo plazo. Las consideraciones sobre la movilidad son esenciales para los pacientes con derrame cerebral durante y después del procedimiento, especialmente para las personas con sobrepeso que pueden necesitar cuidados especiales.
El tratamiento intravenoso (IV) consiste en administrar entre 75 y 150 millones de células madre y entre 3 y 5 mil millones de exosomas.
El propósito principal de la administración intravenosa es abordar los efectos del derrame cerebral en el sistema nervioso central (SNC), al mismo tiempo que se enfoca en los nervios periféricos y el intestino, a menudo conocido como el “segundo cerebro”. La entrega sistémica de células madre y exosomas ayuda a reparar y regenerar posibles daños en los nervios a lo largo del cuerpo, lo que potencialmente revierte los daños estructurales causados por los derrames cerebrales y alivia los síntomas asociados. Además, los efectos antiinflamatorios sistémicos de las células madre pueden proporcionar una amplia gama de beneficios.
El propósito secundario del tratamiento intravenoso es asistir a los otros órganos y sistemas internos del paciente, que a menudo trabajan más para compensar la capacidad reducida causada por la condición primaria. Este tratamiento puede ayudar a regenerar y reparar el daño en estos órganos secundarios y músculos, así como aliviar la tensión en los riñones y el hígado causados por el procesamiento de diversos medicamentos.
Nuestro equipo en CRC está comprometido en frenar la progresión de las enfermedades neurodegenerativas a través de tratamientos regenerativos innovadores. Ya sea que enfrentes el Parkinson, Alzheimer o cualquier otra condición neurodegenerativa, nuestras terapias están diseñadas para apoyar la regeneración neural y mejorar la función cognitiva. Al dirigirse a los mecanismos naturales de curación del cerebro, nos esforzamos por mejorar tu calidad de vida y preservar la independencia el mayor tiempo posible.
Experto líder en Células Madre
Uno de los especialistas más prestigiosos en procedimientos estéticos y cirugía cosmética en Tijuana, México.
Propietario del ITC (Instituto de Terapia Celular), el banco de células más grande e importante de México. Ha tratado a atletas profesionales y políticos importantes.
El Dr. Cota se ha enfocado en la medicina regenerativa desde 2021, con una amplia experiencia en la aplicación de células madre en la práctica clínica. Actualmente está cursando una Maestría en Medicina Regenerativa y ya está contribuyendo al tratamiento y los resultados de los pacientes. Su formación en Anestesiología le proporciona un profundo conocimiento en el manejo del dolor, lo que potencia aún más su impacto en la atención al paciente.
Los resultados pueden variar entre individuos. No se hacen afirmaciones sobre las terapias regenerativas.
La FDA considera la terapia con células madre como experimental.
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